Este blog surge con la idea de mantener un espacio en el que padres, madres y profesionales compartan experiencias sobre el desarrollo del niño/a, la educación y la discapacidad en general. Informar sobre todas las actividades realizadas en el centro, así como del material elaborado por sus profesionales para que os podáis beneficiar del mismo.
sábado, 15 de noviembre de 2014
PRESENTACIÓN CUENTO "ANOCHE SOÑÉ"
Enseñar a los hijos a ser ordenados
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Publicado por Irene Solaz Velázquez el 26 mayo, 2014
La organización ayuda a que todos, independientemente de nuestra edad, estudiemos o trabajemos mejor, y a que estemos más tranquilos. Enseñar a los hijos a ser ordenados hará que se organicen mejor de forma natural toda su vida, ya que habrán adquirido este hábito desde siempre. ¿Cómo podemos enseñar a los más pequeños a ser organizados en su día a día?
Consejos para enseñar a los hijos a ser ordenados:
1. Ser un ejemplo a seguir
Los padres y hermanos mayores también deben hacer la cama todas las mañanas, recoger el plato después de comer y dejar los platos en el lavavajillas en vez de en la encimera. No se puede enseñar a los hijos a ser ordenados sin dar ejemplo de ello. Cuando los hijos observan que sus padres siempre mantienen la casa ordenada, imitarán estos hábitos.
2. No ordenar por ellos
Si un niño no devuelve los juguetes a su lugar original ni coloca sus libros y cuadernos en la mochila después de haberlos utilizado, los padres deben pedirle que sea más ordenado y deberán exigir el comportamiento ideal en vez de recoger ellos mismos los materiales. Los padres quieren una casa organizada y saben que es más rápido ordenarla ellos mismos en vez de esperar que los hijos adopten este hábito, pero deben insistir en que cada persona se haga responsable de sus actos, o de lo contrario no será sencillo enseñar a los hijos a ser ordenados.
3. Cada material tiene su lugar correcto
Los niños deben conocer cuál es el lugar ideal para los cuadernos y libros, juguetes y productos de higiene.
4. Premiar el comportamiento adecuado
Los padres deben mostrarse agradecidos y orgullosos ante la organización de sus hijos, pero deben hacer evidente su insatisfacción cuando el hijo no es ordenado.
5. Valorar la intención
Los padres no deben corregir a sus hijos cuando consideran que podrían hacerlo mejor. El hecho de intentar ordenar una habitación debería ser suficiente, pues todos podemos equivocarnos pero mejoramos al identificar nuestros propios errores y al desear mejorar. Cuando los padres corrigen demasiado, los hijos no se sentirán motivados.